Con la Navidad a la vuelta de la esquina, las empresas en Argentina empiezan a plantearse cómo organizar la tradicional fiesta de fin de año, con la que es normal agasajar a sus empleados. Este año con una peculiaridad, la elevada tasa de inflación que sufre el país será determinante a la hora de elegir las características de estos eventos.
Porque según AOFREP (Asociación de Eventos de la República Argentina) el incremento que se notará en la factura final que la empresa pague por esta fiesta estará en torno a 30%, respecto a los costos del año anterior. Por eso, más que nunca, conviene iniciar estos preparativos con tiempo suficiente para poder encontrar las mejores ofertas y contener los gastos sin que afecte a la calidad del evento.
Una de las salidas a las que más se está recurriendo en los últimos años, precisamente por los efectos positivos que tiene en los presupuestos de las empresas, pasa por compartir varias compañías un mismo local, de forma que estas “fiestas compartidas” permiten un razonable reparto de los costos.
Respecto a las cifras con las que deben manejarse los organizadores de estos eventos, el promedio está entre los $ 1.200 y 1.800 por persona. Para hacernos una idea final, si la empresa cuenta con unos 50 empleados, la fiesta le costaría unos $ 90 mil. De esta cantidad, el catering representa la partida más costosa, aproximadamente el 40 por ciento del gasto total.
Otro de los montantes importantes es el local, más o menos el 10% de la factura.